InicioBlogDanza y música para conectar con la demencia
Fotografía de Miguel Zomas

Danza y música para conectar con la demencia

En esta ocasión os acercamos una lectura en formato entrevista a Iker Arrue, una persona maravillosa con la que hemos tenido la suerte de cruzarnos a través del proyecto Dementia in Cultural Mediation (DCUM). Bailarín, coreógrafo y co-director de la compañía de danza AI DŌ Project, su aportación a la escena de la danza del País Vasco le ha valido el Premio de Danza 2022. Iker ha sabido conjugar su actividad artística con una inquietud personal por mejorar la vida de las personas con demencia, devolviéndolas a un espacio, como es el del arte y la cultura, del que parecen haber sido expulsadas tan solo por su condición. Crea a partir de ello un proyecto social bautizado con un nombre tan evocador como "Invisible Beauty" (Belleza invisible). No desvelamos más y os dejamos que nuestro protagonista nos describa esta conexión mágica que logra la danza y la música con las emociones de las personas con demencia.

P - Bueno Iker, ¿de dónde nace tu interés por trabajar con personas con demencia a través de la danza?

Iker - He sido bailarín profesional durante 20 años y habiendo tenido un padre con Alzheimer pensé que podría aportar o compartir pequeños ejercicios que había intentado realizar con mi padre durante los 15 años que duró su enfermedad. Por un lado de cara a la estimulación física; movimientos o gestos cotidianos que a mi padre le costaba cada vez más reproducir, como girarse para sentarse en una silla, soltar un objeto, mirar a lo lejos, dejarse vestir…  Por otro lado, la satisfacción y estimulación emocional que supone ver un espectáculo de danza y música en directo y la influencia que ello tiene en nuestro bienestar y forma en la que después nos comunicamos con nuestro entorno.

P - ¿Cómo fueron los inicios de esta experiencia?

Iker - Además de lo vivido con mi padre, o mejor dicho... motivado por lo vivido con mi padre, en el año 2013, cuando él se unió al programa anual de talleres de psicoestimulación-cognitiva que ofrece la asociación AFAGI, propusimos desde la compañía de danza realizar una pequeña prueba y ofrecer a los usuarios de la asociación un acercamiento al proceso creativo de danza Ai Do Project que estábamos realizando entonces. La idea era compartir cómo a partir de algunas fotos podíamos reproducir movimientos e integrarlos en la coreografía, con el objetivo de invitarlos después a que ellos mismos reprodujeran esos movimientos.

La respuesta fue realmente sorprendente. La fotografías que usamos eran fotografías de guerra; fotoperiodismo.  Nuestro punto de partida en la creación era intentar encontrar algo positivo en aquellas fotografías que a priori generaban sólo rechazo. Fue muy interesante observar que los participantes no se quedaban con el dolor que reflejaban las imágenes, sino que conectaban directamente con la experiencia y la satisfacción de reproducir los gestos que no les resultaban fáciles de imitar, pero que con paciencia lograban reproducir con éxito. 

P - ¿Puedes describir cómo trabajas con ellas? ¿Qué metodología empleas?

Iker - Realizamos una serie de encuentros a lo largo del año en los que a través de la música y la danza, intentamos estimular las capacidades físicas, musicales y como decía, sobre todo emocionales de los participantes.

Adaptamos piezas de danza o música a sus capacidades y las interpretamos para ellos en directo, en un auditorio o sala que previamente hemos acondicionado para la ocasión. Ofrecerles una experiencia teatral lo más real posible (escenografía, iluminación, vestuario...) es el punto de partida del proyecto. Después combinamos pequeños ejercicios de ritmo y movimiento que intercalamos entre las piezas mostradas.

Éste es un proyecto que dirigimos en colaboración con AFAGI y los encuentros los realizamos con los usuarios de la asociación. La mayor parte de las veces sin familiares, sólo afectados, porque fortalecer su sentido de autonomía es uno de los objetivos de este trabajo. No obstante, es importante realizar algún encuentro que incluya también a los familiares ya que como hemos visto, ello también genera un beneficio muy particular.

El formato del proyecto puede y debe adaptarse a las necesidades de cada colaborador y de cada participante, por supuesto. Los usuarios de AFAGI acuden de forma voluntaria, lo que ya define en gran medida el perfil de las personas con las que trabajamos. Lo que sí hemos observado es que sea cual sea el grupo con el que trabajas, cuanto más cerca esté de reproducir una experiencia teatral, mayor es el impacto que genera la intervención en los participantes.

Nuestra metodología se basa principalmente en que somos una pequeña compañía de danza que colabora con una asociación y nuestra realidad es que trabajamos por proyectos. Es un proyecto que ya se ha integrado en estructuras mayores que la nuestra, como la Compañía Nacional de Costa Rica, pero ello también supone adaptar la metodología y contenido a un nuevo entorno.

Imagen de un taller del proyecto Invisible Beauty celebrado en nuestra casa de Petra Lekuona desde la iniciativa Matia Zaleak

P - ¿Qué meta te has marcado con Invisible Beauty?

Iker - El proyecto busca no sólo satisfacer las necesidades de las personas con demencia sino también las necesidades de cada una de las entidades colaboradoras.

Durante las últimas ediciones hemos colaborado con estudiantes de música y danza de los centros MUSIKENE  y “María de Ávila” de Madrid, respectivamente. En el 2023 colaboraremos también con la escuela de música y danza de Renteria. La idea de integrar estudiantes para que trabajen junto a profesionales del sector, es la de fortalecer las relaciones inter-generacionales y al mismo tiempo mostrar a los artistas una alternativa laboral diferente a la tradicional. La experiencia nos ha mostrado que muchos encuentran un camino a explorar y desarrollar, lo que es ya sin duda un éxito.

Ofrecemos a los intérpretes la posibilidad de que presenten sus propias creaciones o incluso que creen una pieza  específicamente para el encuentro. De esta forma, nos aseguramos que sus necesidades de creación también queden cubiertas.

El material diseñado para cada encuentro se comparte también con los centros colaboradores con el objetivo de que los trabajadores sociales y psicólogos puedan integrarlo de forma sencilla en sus propios talleres.

Nos interesa incorporar a los encuentros el mayor número de disciplinas posibles ya que aunque el enfoque es claramente artístico, cuanto más diversa sea la información compartida, mayor la probabilidad de que todos los participantes encuentren algo con lo que identificarse (referencias musicales, sociales, profesionales…).

Pero el objetivo general, es sin duda la estimulación emocional. Ojo, siempre con el nivel de exigencia artístico-profesional más alto posible. Aceptar que porque tengan demencia puedas presentar un trabajo mediocre es un error. Si de algo entienden, es precisamente de tener sensibilidad.

P -  ¿Cómo haces para comunicarte con las personas? ¿Qué estrategias utilizas?

Iker - Intentamos mostrarnos lo más cercanos posibles, en todo momento, pero con un punto de travesura. Huimos de protegerlos en exceso y los ponemos al límite de sus capacidades. Somos un poco gamberros, siempre con predisposición para la risa y para compartir emociones, que al fin y al cabo es de lo que se trata.

Como estrategia, lo que pretendemos en conectar con ellos a nivel emocional. Normalmente realizamos vistas previas a la asociación antes del encuentro oficial, que además de servir de primer acercamiento, nos permiten preguntarles sobre sus referencias musicales y culturales. En la medida de lo posible, integramos esta información en el diseño de las sesiones con la idea de maximizar el impacto emocional del encuentro.

P - Como mencionábamos al inicio, nuestro camino se ha encontrado gracias a un proyecto Erasmus+ que buscaba recabar buenas prácticas en la mediación cultural con personas con demencia en cuatro regiones europeas (Países Bajos, Dinamarca, Bélgica y España). ¿Cuál sería tu valoración de tu participación en DCUM? ¿Qué aspectos destacarías y cuáles han podido quedar pendientes?

Iker - Entre los aspectos a destacar, sin duda la influencia y enriquecimiento de haber podido observar y aprender de otros proyectos. Dentro de DCUM se presentaban tanto iniciativas de pequeñas entidades como las de grandes instituciones de varios países de Europa. Las facilidades y dificultades de cada una son muy diferentes, lo que nos ha invitado a una interesante reflexión y a cuestionarnos por ejemplo, la estrategia a medio/largo plazo de nuestro propio proyecto.

Aunque las necesidades de las personas con demencia son las mismas en cualquier parte del mundo, aún dentro de Europa, existen muchas diferencias culturales.

Observar lo que en otros países genera mayor impacto emocional en los participantes ha sido muy interesante para nosotros. Nos ha invitado a hacer mayor hincapié en conocer e integrar en los encuentros las referencias socio-culturales de los participantes, con el objetivo final de crear un impacto emocional aún mayor.

Pendiente quedaría, quizás, haber tenido los medios para realmente realizar un intercambio in-situ con otras entidades, es decir, haber podido ofrecer a participantes de otros proyectos (personas con demencia) parte de nuestra iniciativa, no sólo haberla compartido a nivel teórico con sus directores o responsables.  

P - Por último, Iker, ¿en qué crees que beneficia lo que haces con estas personas?

Iker - ¿En qué nos beneficia al resto tener un buen nivel de bienestar?. Con o sin demencia, las necesidades de las personas siguen siendo las mismas.

 

Autor

Bailarín, coreógrafo, co-director de la compañía de danza AI DŌ PROJECT

Añadir nuevo comentario

Plain text

  • No se permiten etiquetas HTML.
  • You may use [block:module=delta] tags to display the contents of block delta for module module.
  • You may use [view:name=display=args] tags to display views.
  • Las direcciones de las páginas web y las de correo se convierten en enlaces automáticamente.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.